¿Cómo surgió la idea de «Mimethic» y qué te inspiró a crear este proyecto centrado en el turismo sostenible?

Siempre me ha gustado mucho viajar. Mis primeros viajes de intercambio en el instituto me despertaron mi interés por conocer nuevas culturas y decidí estudiar turismo. Pero, tras algunas experiencias laborales, vi que el enfoque tradicional del turismo no reflejaba lo que significaba para mí: una oportunidad de aprender y conectar con los lugares que visitaba.

Esto me llevó a hacer un máster en Cultura de Paz, Educación y Derechos Humanos, buscando una forma de alinear mi pasión por los viajes con valores de responsabilidad social.

Hace dos años volví al ámbito turístico, esta vez desde una ONG para la protección de la infancia y la adolescencia en los viajes y el turismo y la promoción del turismo responsable. Ahí noté que, aunque se habla mucho de turismo sostenible, todavía falta mucha información sobre el tema.

Además, en mis últimos viajes, me he dado cuenta de lo complicado que puede ser organizar un viaje con un enfoque sostenible. La cantidad de información en internet es abrumadora, y encontrar opciones verdaderamente responsables se convierte en una tarea complicada, ya que hay mucho greenwashing que esquivar y asegurarse de que las actividades realmente tengan un impacto positivo requiere mucho tiempo.

Así que así surgió Mimethic, para ayudar a las personas que, como yo, buscan que sus viajes dejen una huella positiva.

Queremos darnos la oportunidad de reconectar con la esencia del viaje: aprender, descubrir y dejarse sorprender, mientras contribuimos al bienestar de las comunidades locales y al respeto por el medio ambiente.

¿Qué significa para ti “buscar lo auténtico” de cada destino y cómo lo implementas en las guías de Mimethic?

Para mi cada lugar tiene elementos que lo hacen único, incluso si a simple vista puede parecerse a otros destinos. Si pensamos en un destino cuyo principal atractivo es la montaña me esfuerzo por descubrir qué lo diferencia de otros destinos similares. Esto va más allá de aspectos físicos como el paisaje, el clima o la flora y fauna; tiene que ver con las personas que lo habitan.

Ellas crean y transforman el entorno con sus actividades y lo hacen de forma distinta a las de generaciones anteriores, en un proceso en constante cambio.

El problema es que cada vez más destinos tienden a homogeneizarse, algo que es especialmente evidente en las ciudades.

Las políticas de desarrollo turístico suelen estar desarrollan dirigidas en un turista psicocéntrico, que buscan destinos con infraestructuras adaptadas específicamente al turismo, lugares que le resulten conocidos y culturalmente familiares.

Este enfoque, que busca ofrecer una sensación de familiaridad, acaba diluyendo la identidad y autenticidad de los destinos creando políticas centradas únicamente en el turismo.

En las guías de Mimethic nos esforzamos por ofrecer contenido súper específico de cada destino. Lo hacemos través de una investigación profunda sobre la historia y el contexto del territorio, acercando historias y curiosidades que van mucho más allá de una simple lista de cosas que ver y hacer.

Además, incluimos conversaciones y entrevistas con referentes locales y expertas de la comunidad local, que realmente son las personas que mejor conocen su territorio y pueden mostrarnos lo auténtico de cada destino.

¿Cómo seleccionáis los destinos que incluís en vuestras guías de viaje? ¿Qué criterios de sostenibilidad y autenticidad seguís?

Hemos lanzado la colección Viajes por la España Rural para fomentar el turismo responsable como una vía complementaria de desarrollo económico en zonas rurales, enfocándonos en destinos «secundarios» fuera de las rutas turísticas convencionales.

Creemos que fortalecer el tejido económico rural mediante el turismo responsable puede ayudar a combatir la despoblación, fortaleciendo su tejido económico local.

En cuanto a los criterios de sostenibilidad y autenticidad, nos aseguramos de que las empresas que recomendamos cumplan con ciertos principios básicos de sostenibilidad, como minimizar el impacto ambiental.

Sin embargo, entendemos que muchos de los negocios en estas zonas son pequeños comercios o empresas familiares, que trabajan con los recursos disponibles en su día a día. Por eso, en esta fase, nos enfocamos en recomendar negocios que sean principalmente familiares y que ya estén integrando prácticas sostenibles o estén dispuestos a adoptar medidas en ese sentido.

Apostamos por aquellos que muestran un compromiso genuino con su entorno y su comunidad, lo que contribuye a mantener la autenticidad del destino.

Uno de los pilares de Mimethic es fomentar conexiones profundas entre los viajeros y las comunidades locales. ¿Cómo se puede lograr que estas conexiones sean enriquecedoras tanto para los viajeros como para los habitantes locales?

Desde el respeto y la empatía, sin duda. Nos encontramos en un momento en el que prima la inmediatez y la búsqueda de la foto perfecta y eso hace que muchos viajeros se desconecten por completo de la realidad de los lugares que visitan y de las personas que lo habitan.

Por eso, en Mimethic hemos apostado por hacer guías impresas, en papel, contra todo pronóstico. Queremos transmitir una sensación de calma y reflexión que nos incentive a detenernos, hablar con la gente local – ya sea la que persona que está en la recepción, detrás de una barra o en un mostrador – y conectar con ellos de forma auténtica.

En nuestras guías se incluyen entrevistas y conversaciones con personas reales, con nombre y apellidos, y en algunos casos, incluso su retrato. Esto permite que el viajero empatice con las historias que contanmos y comprenda que detrás de cada paisaje hay una comunidad que lo trabaja y le da significado.

Es a través de esta empatía que el turista se aproxima de forma más respetuosa al territorio, lo que no solo enriquece su experiencia de viaje, sino que también beneficia a los habitantes locales y al entorno en su conjunto.

¿De qué manera Mimethic busca educar a los viajeros sobre la importancia del turismo responsable y sus efectos en el entorno que visitan?

Como viajeros, tenemos que tener claro que siempre dejamos una huella en los territorios que visitamos. A veces esa huella puede tener un fuerte impacto negativo, ya sea por desconocimiento de lo que estamos haciendo o por desinterés.

Para cubrir ese desconocimiento, en nuestras guías incluimos consejos específicos de turismo responsable adaptados a cada destino. Aunque existen recomendaciones generales que se aplican a todos los viajes, cada lugar presenta actividades y riesgos particulares que es fundamental considerar.

Además, a través de nuestro perfil de Instagram y nuestro blog, compartiremos consejos de turismo responsable en diferentes niveles. Buscamos crear conciencia y fomentar prácticas sostenibles que no solo beneficien a los viajeros, sino que también protejan y respeten las comunidades y el entorno que visitan.

¿Cómo crees que proyectos como Mimethic pueden influir en la desestacionalización del turismo y en la generación de un flujo de viajeros más equilibrado durante todo el año?

Para reducir la estacionalización del turismo, nos esforzamos en proponer actividades que se puedan realizar en distintas épocas del año, pero hemos observado que, en ocasiones, los destinos no están preparados para recibir turismo fuera de temporada.

Al iniciar el proyecto, la desestacionalización era uno de nuestros objetivos. Sin embargo, nos hemos dado cuenta que saturar los destinos durante todo el año no es una solución sostenible y puede perjudicar especialmente a los negocios familiares.

Por eso, buscamos equilibrar los flujos de viajeros proponiendo rutas y destinos alternativos a los más masificados, promoviendo a su vez la equidad económica entre regiones. De esta manera, ayudamos a crear un panorama turístico más sostenible y justo para todos.

¿Qué es para Judit Alcaide el turismo sostenible?

Para mí, el turismo sostenible implica que sea una actividad económica justa para el medioambiente, para la sociedad y las comunidades locales, pero también para las personas trabajadoras del sector, quienes a menudo son olvidadas de la ecuación.

Como consumidores, tenemos un gran poder de elección, y parte de la sostenibilidad pasa por priorizar la calidad de nuestras experiencias de viaje sobre la cantidad.

Sin embargo, no podemos dejar toda la responsabilidad en manos de los viajeros. Es fundamental que las instituciones establezcan políticas que impulsen la sostenibilidad y el bienestar común, y que las empresas privadas asuman su responsabilidad, dejando de usar la sostenibilidad como una simple estrategia de marketing.

Si queremos seguir disfrutando de los viajes en el futuro, necesitamos cambiar nuestra perspectiva y entender el turismo más allá de su valor económico, considerando su impacto real en el entorno y en las personas.